Después de varios aplazamientos se llevó a cabo el intercambio
deportivo con la escuela de formación deportiva de los córdobas y sí que
valió la pena la espera. Los samarios una vez llegaron al sitio
acordado es como si avistaran la tierra prometida, los pollitos se
dieron un baño en lodazal de señor y padre nuestro dejando atrás las
normas de higiene enseñadas en casa y en el cole.
La pertinaz
llovizna no fue impedimento para la fiesta deportiva que se vivió entre
las dos escuelas que disfrutaron en dos encuentros de una auténtica
hermandad futbolística.
Los padres de familia que acompañaron la
delegación samaria manifestaron su satisfacción, luego de terminar la
jornada, disfrutaron con las pilatunas de sus cachorros y hasta hubo
tiempo para una merecida siestecita.
Los entrenadores vieron como sus pupilos mejoran en la práctica del buen fútbol y ven en sus dirigidos un futuro halagador.
Los anfitriones se portaron de manera excelente, mostrando siempre cordialidad y respeto por la visita.
Las
directivas destacan un balance positivo en la jornada y anuncian que se
vendrán nuevas salidas gracias al buen comportamiento mostrado por
todos los participantes en el intercambio dominical en los córdobas.
Y con un baño en la playa
Para terminar el día
No hubo ninguna falla
Lo digo con alegría.